Las mascarillas de arcilla se han convertido en uno de los tratamientos más populares en el cuidado de la piel, gracias a sus múltiples beneficios.
Si te has preguntado cuánto cuesta disfrutar de este tratamiento y qué efectos puede tener en tu piel, ¡estás en el lugar correcto! En este artículo te contamos cuánto debes invertir para una mascarilla de arcilla, qué beneficios ofrecen para tu piel y algunas recomendaciones para aprovechar al máximo su uso.
¿Qué beneficios tienen las mascarillas de arcilla?
La arcilla es un ingrediente utilizado desde la antigüedad en el cuidado de la piel, y hoy en día, las mascarillas de arcilla son una de las mejores formas de aprovechar sus beneficios.
De acuerdo con expertos en la salud como L’oréal París detallan algunos beneficios del uso de las mascarillas de arcilla en la piel, como por ejemplo:
- Desintoxicantes y purificantes: Ayudan a absorber el exceso de sebo, la suciedad y las impurezas de los poros, limpiando profundamente la piel.
- Exfoliantes: Pueden ayudar a eliminar las células muertas de la piel, dejándola más suave y con un aspecto más luminoso.
- Control del sebo: Son especialmente beneficiosas para pieles grasas, ya que ayudan a regular la producción de sebo y a reducir el brillo.
- Calmantes y antiinflamatorias: Algunas arcillas, como la arcilla blanca o rosa, tienen propiedades calmantes que pueden ayudar a reducir la irritación y el enrojecimiento.
¿Cuánto cuesta ponerse una mascarilla de arcilla?
El costo varía significativamente, por ejemplo en un salón de belleza o spa, un tratamiento facial con mascarilla de arcilla puede costar desde 275 pesos hasta 1, 350 pesos mexicanos o incluso más, dependiendo del prestigio del lugar, los productos utilizados y si se incluye algún otro tratamiento facial.
Mientras que hacerla desde casa es un costo mucho menor. Puedes comprar arcilla en polvo por precios que van desde 60 hasta 265 pesos por cantidades considerables (por ejemplo, 1 kg), lo que te permitirá hacer muchas mascarillas.
También puedes encontrar mascarillas de arcilla pre-hechas en tiendas de belleza y farmacias a precios que oscilan entre 83 y 570 pesos, dependiendo de la marca y los ingredientes adicionales.
¿Cómo saber si puedes usar una mascarilla de arcilla?
Antes de la aplicación de una mascarilla debes conocer tu tipo de piel; ya sea que tengas, piel grasa o mixta, piel seca, piel sensible o piel normal.
Como segundo factor debes considerar los problemas específicos de la piel como el acné o puntos negros, la piel apagada o con manchas o los poros dilatados, esto te ayudará a elegir el tipo de arcilla que necesitas.
Algunos de los tipos de arcilla son:
- Arcilla verde: Ideal para pieles grasas y con tendencia al acné por su alta capacidad de absorción y propiedades desintoxicantes.
- Arcilla blanca (caolín): Es la más suave, adecuada para pieles sensibles y secas. Limpia sin resecar y tiene propiedades calmantes.
- Arcilla roja: Rica en hierro, buena para revitalizar pieles maduras y cansadas, y para mejorar el tono de la piel.
- Arcilla rosa: Una mezcla de arcilla blanca y roja, suave pero eficaz, ideal para pieles sensibles que necesitan purificación sin irritación.
- Arcilla amarilla: Ayuda a restaurar el tono de la piel, mejorar la circulación y es buena para pieles apagadas.
Antes de aplicar cualquier mascarilla de arcilla en todo tu rostro, es crucial realizar una prueba de parche. Aplica una pequeña cantidad de la mascarilla en una zona discreta, como la parte interior de la muñeca o detrás de la oreja.
¿Cómo preparar una mascarilla de arcilla desde casa?
Para preparar tu propia mascarilla casera necesitarás:
- 1-2 cucharadas de arcilla en polvo (según tu piel: verde para grasa/acné, blanca para sensible/seca, roja para revitalizar).
- Agua (u otro líquido como hidrolato o té frío) – cantidad necesaria para formar pasta.
Instrucciones:
- En un recipiente NO metálico, mezcla la arcilla con el líquido poco a poco.
- Revuelve hasta obtener una pasta suave y homogénea.
- Aplica en rostro limpio y seco (evitando ojos y labios).
- Deja actuar 5-15 minutos (no dejes que se seque por completo).
- Enjuaga suavemente con agua tibia.
- Hidrata tu piel después.